¿Un Remiendo de Paño Nuevo para un Vestido Viejo?

El pasado 7 de diciembre de 2012, el Presidente Medina dictó el nuevo Reglamento del Mercado de Valores, mediante el Decreto No. 664-12. Como mencionamos en una entrega pasada, este es el tercer texto reglamentario que se dicta para la Ley del Mercado de Valores No. 19-00, desde su promulgación el 8 de mayo del año 2000. Sin embargo, la Ley 19-00 no ha sido actualizada ni modificada sustancialmente desde su promulgación original.

Ciertamente, el gobierno del Presidente Medina ha estado enfocado en la implementación de políticas públicas innovadoras, orientadas a desarrollar el empoderamiento económico y la iniciativa privada de todos: especialmente, de los más marginados. Sin embargo, muchos juristas, académicos y profesionales del sector financiero opinan que el contenido normativo del Reglamento del Mercado de Valores es una reforma truncada. Lo ideal hubiese sido una reforma “integral”, que abarcara la Ley y descendiera en cascada para actualizar todo el ordenamiento normativo (“top down reform”).

La vía que se adoptó fue la de modificar sólo el Reglamento (un decreto presidencial), dejando la Ley igual. La reforma se hizo con la finalidad de conciliar el ordenamiento del mercado de valores con otras reformas recientes, incluyendo el contenido de la Ley No. 189-11 sobre Desarrollo del Mercado Hipotecario y Fideicomisos, y la Ley No. 479-08 sobre Sociedades Comerciales y Empresas Individuales de Responsabilidad Limitada.

Cuando se trata de reformas sistemáticas, no debemos elegir los parches, remiendos y los recosidos normativos por encima de las “reformas integrales”. ¿Acaso padecemos de una propensión cultural hacia la importación (copia) normativa y el reciclaje de textos viejos y obsoletos? Si un cuerpo normativo está “roto”, la zurcimos con un remiendo antes de cambiarlo o actualizarlo sistemáticamente.

Más vale que nos cuidemos, como dice el Maestro en aquél célebre verso bíblico. Cuando optamos por ponerle un remiendo nuevo a un vestido viejo, corremos el riesgo de que el recosido tire del vestido, haciendo peor la rotura.

Advertisement

Leave a Reply

Fill in your details below or click an icon to log in:

WordPress.com Logo

You are commenting using your WordPress.com account. Log Out /  Change )

Twitter picture

You are commenting using your Twitter account. Log Out /  Change )

Facebook photo

You are commenting using your Facebook account. Log Out /  Change )

Connecting to %s